El perro me miró dulcemente,
con sus ojos tranquilos y dorados,
y parecía preguntarme: ¿Y yo?
Así que un día me atreví a responderle:
Ahora vivimos, y un día no viviremos;
una igual sombra nos va a cubrir a ambos.
Y entonces movió la cola. ¿Su respuesta?
(José Jiménez Lozano, Elegías menores)
3 comentarios:
me gusta mucho
esta bastante bien ( soy samaniego )
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